Página 45 del número 147, de agosto de 2008
14/7/08 11:34 Página 1 CHRYSLER SEBRING CABRIO 2.0 CRD LIMITED MO pg45 OR T Abrirse al placer i usted viaja a los EE UU y piensa en alquilar un descapotable, tiene muchas posibilidades de que sea un Chrysler Sebring, porque esta marca vende cerca del 70% de los cabrios del mercado estadounidense gracias al modelo de la anterior generación, líder de ventas durante una década. En realidad, los convertibles han sido siempre una constante en la historia de Chrysler, cuya última creación es la protagonista de nuestra prueba mensual. A diferencia de la berlina, que es un modelo de concepción próxima a los estándares europeos, el nuevo Sebring Cabrio tiene un marcado acento americano con una excepción: su paso por la gasolinera será poco frecuente gracias al motor TDi de origen Volkswagen. Además, se caracteriza por la posibilidad de elegir entre un techo retráctil (versión Limited) o bien una capota de lona (Touring), con lo cual se satisface a los prácticos y a los clásicos. A la vista llama la atención su gran tamaño y es que hablamos de 4,93 metros de largo. Gracias a ello el amplio interior acoge a cuatro ocupantes de forma generosa y la estética del habitáculo resulta en su conjunto muy americana. Los asientos delanteros parecen butacas, llevan integrados los cinturones para que no estorben cuando accedemos a los asientos traseros y mantienen la posición inicial cuando se desplazan con este fin. Las plazas traseras son amplias y permiten acomodarse a dos adultos. Los amantes del buen sonido disfrutarán además de un excelente sistema audio Boston Acoustics de 279 watios y un disco duro donde se puede almacenar mucha música. S No falta la climatización automática, el reglaje eléctrico del asiento del conductor o los sujetavasos que nos enfrían los refrescos y calientan el café: american way of life en estado puro. El modelo probado correspondía al de techo rígido. Dividido en tres partes desaparece en el maletero en 30 segundos y éste pasa de 356 litros de volumen a 193. En cuanto a comportamiento dinámico, nos encontramos unas suspensiones blandas, estilo americano, lo que, junto a su peso de 1,8 toneladas, invitan a una conducción tranquila, alargando las marchas, sin violentarlo. En ciudad, y para las maniobras de aparcamiento, se nota la falta de un sistema de ayuda que vendría muy bien dado el tamaño de este automóvil. En cuanto al motor de origen Volksagen, sobre todo al ralentí y en las aceleraciones se deja oír bastante, aunque no molesta en autopista cuando vamos a una velocidad sostenida. Es cierto que no mueve con alegría este pesado cabrio, pero en cambio su consumo resulta irrisorio, con una media de 6,5 litros. La clave del Sebring Cabrio es ofrecer un enorme placer de uso, en plan tranquilo que no deportivo, y la posibilidad de tener un descapotable original con cuatro verdaderas plazas y por un coste racional de compra y de gasto de combustible. Y un último consejo: descapote, busque alguna carretera perdida, conduzca a ritmo tranquilo y descubrirá a primeras horas de la mañana o últimas de la tarde los olores, sonidos y sensaciones de una Castilla y León que se pierden los usuarios de las berlinas cerradas. Placer en estado puro. Nº 147 Agosto 2008 Santiago de Garnica
