Página 25 del número 142, de marzo de 2008
pg24-25 19/2/08 16:22 Página 2 del fundador, añade: ?el éxito comercial del Southface se debe a su sencillez: es barato, fiable y duradero, con componentes fáciles de fabricar?. El diseño de este producto junto a Cartif se inició con sus primeros bocetos en 2006; y en febrero de 2007 se presentó el primer prototipo. ?Venimos del sector industrial. Nuestros clientes tradicionales nos han enseñado muchas cosas, ya que el sector de la automoción nos ha dado sus secretos de fabricación, que posteriormente hemos podido aplicar a otras actividades?, explica Molina González. Las directivas europeas en materia de energías renovables han provocado que Mecapisa se encuentre en una coyuntura de actividad extrema. Actualmente, cuenta con una cartera de pedidos de más de 22 millones de euros y las energías limpias son las responsables del despegue de una firma que en 2006 facturó 902.000 euros; cerró el ejercicio 2007 con una cifra de ventas de 2,2 millones; y las previsiones para el término de 2008 apuntan hacia los 22 millones de euros. Enrique Espinel explica cómo la firma dio el salto a las renovables: ?cuando en la automoción se produjo una reestructuración del tipo de proveedor, hacia uno único y de gran dimensión, nos planteamos un crecimiento rentable, con cuatro cambios en la estrategia de dirección?. La primera de esas políticas fue la diversificación del cliente: ?lo mismo que hacíamos para el automóvil, comenzamos a aplicarlo a la aeronáutica, con el tirón del proyecto del Airbus A-380 y la implantación de Aresa en el Parque Tecnológico de Boecillo?. La segunda diversificación se centró en el producto, sumando las energías renovables a su cartera industrial, con un plan trienal que contempla la comercialización de su seguidor; posteriormente la fabricación de una estructura fija, que se encuentra en fase de registro de patente y que tendrá un gran desarrollo por la obligación del Código Técnico de Edificación de instalar este tipo de estructuras en los edificios de nueva construcción. Y las placas térmicas para calentar agua en edificación, que no generan electricidad, sino que simplemente pasan el calor del sol al agua y cuya previsión es lanzarlas al mer- Enrique Espinel, presidente de Mecapisa. cado en septiembre de este año, apunta Roberto Pallarés, responsable Comercial de Mecapisa, quien añade que la ventaja de esta placa es que resultará muy atractiva para los arquitectos por su integración total en el diseño del edificio. Fábrica en Portugal La tercera estrategia es la innovación. Por eso, la empresa se trasladó del polígono vallisoletano de San Cristóbal al Parque Tecnológico de Boecillo, ?el cogollo de la I+D+i en Castilla y León y uno de los mejores recintos de España?, precisa Espinel, donde trabajan codo a codo con los dos centros tecnológicos más importantes del parque: Cidaut, y especialmente Cartif, con quien tiene suscritos contratos de colaboración. Y la cuarta pata de su plan estratégico es la internacionalización, con la puesta en marcha de una fábrica en Alfandega da Fe (Portugal), en la que Mecapisa España cuenta con una participación del 70% y el Gobierno luso, a través del ayuntamiento de la localidad donde se ha implantado la firma, el 30%. Además, la empresa se encuentra a la espera de abrir líneas de negocio con Grecia, Italia, Marruecos y Portugal. El gerente precisa que en Mecapisa España dirigen la construcción y son los gestores de los proyectos, centrándose en la I+D+i, mientras que la ejecución del trabajo corresponde a proveedores de la zona y a Mecapisa Portugal. Nº 142 Marzo 2008
