Página 13 del número 124, de septiembre de 2006
pg 12-14 3/8/06 11:54 Página 2 rencia de las competencias a las comunidades autónomas y por la progresiva subcontratación de los servicios. CIC ha sabido aprovechar esa oportunidad con su Área de Salud, al dar respuesta a los servicios que se requieren en las Administraciones autonómicas de sanidad, desde los servicios generales a las áreas de farmacia, radiología, laboratorios, atención primaria y especializada, entre otros. En este campo ya cuenta con una cartera de clientes compuesta por más de 30 hospitales y cerca de 1.000 centros de Atención Juan Valentín-Gamazo, director general de CIC. Unos porcentajes que reflejan un modelo de gestión Detrás de unos fríos porcentajes se puede esconder la filosofía de una empresa, como es el caso de CIC. Así, el 80% de su plantilla permanece fiel a la compañía, cuando en el sector estos profesionales cambian de firma, como media, cada cuatro años. De esta forma, CIC consigue tener poca rotación de trabajadores y retener el talento. De sus trabajadores, sólo el 40% son informáticos, mientras que el resto del personal son economistas, graduados sociales, médicos o abogados, quienes aportan sus conocimientos específicos en esas áreas para optimizar las aplicaciones. Más porcentajes para reflejar la impronta de CIC en sus recursos humanos: el 85% de la plantilla son diplomados o licenciados y el 40% son mujeres. Estos datos ilustran una de las máximas de la empresa: ?el valor de CIC son las personas, ya que la diferencia en el sector de las empresas de servicios y consultoría de informática sólo te la puede dar la plantilla?, explica Juan Valentín-Gamazo, director general de la firma. Otro aspecto importante en este apartado es el desarrollo profesional de las personas, por lo que todos se reciclan en las nuevas tecnologías y se les exige obtener las certificaciones de los principales fabricantes del sector. Recuperar profesionales emigrantes A finales de 2006, CIC contará con una plantilla de 250 personas, con una edad media de 31 años. Durante los últimos años, la empresa ha recuperado cerebros de Castilla y León que se marcharon de la región, principalmente a Madrid, para buscar su primer trabajo. Debido al espectacular crecimiento de CIC, ahora esos profesionales regresan para formar parte del equipo humano de la compañía vallisoletana. ?Esas personas emigraron en su día porque no existía un proyecto empresarial atractivo para ellos. En la actualidad, hemos conseguido que esos talentos regresen a su tierra natal?, apunta Valentín-Gamazo, quien destaca que tienen universitarios en prácticas, de los que un elevado porcentaje pasa a formar parte de la empresa una vez finalizado su aprendizaje. Estos aspectos, y otros más económicos, se abordarán en el Plan Estratégico de la empresa para el próximo lustro, que en la actualidad está elaborando. Nº 124 Septiembre 2006
