Página 40 del número 101, de octubre de 2004
pg.40 22/9/04 11:16 Página 1 PREVENCIÓN DE RIESGOS LABORALES La seguridad es cosa de todos Alberto Salas Sastre, director técnico de Soprecal (Grupo Inzamac) L a primera Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31/1995) surgió, entre otras razones, por la demanda social en pro de solucionar los graves accidentes de carácter colectivo. Desde entonces, esta Ley está cumpliendo su cometido de manera satisfactoria, siendo notable la reducción de este tipo de accidentes, quedando aún pendiente la reducción de los accidentes de carácter individual. Con la entrada en vigor el 14 de diciembre de 2003 de la nueva Ley de reforma del Marco Normativo de la Prevención de Riesgos Laborales (Ley 54/2003), nos vimos gratamente sorprendidos con la obligatoriedad de la presencia de los recursos preventivos (Art. 32 Bis) cuando se dieran circunstancias como: realizar actividades o procesos considerados como peligrosos o con riesgos especiales; cuando los riesgos puedan verse agravados o modificados en el desarrollo del proceso o la actividad, por la concurrencia de operaciones diversas que se desarrollen sucesiva o simultáneamente y que hagan preciso el control de la correcta aplicación de los métodos de trabajo; o cuando sea requerida por la Inspección de Trabajo o Seguridad Social. Extrapolando esto a la construcción, la presencia de estos recursos preventivos es obligatoria casi en todas las obras, y dentro de éstas, prácticamente en todos los tajos; por lo que parece necesario que todas las empresas instruyan a sus encargados de obra con la formación de nivel básico en prevención de riesgos laborales. Esto se debe a que el resto de opciones que habilita la Ley no son suficientemente operativas, ya que si estos recursos preventivos tienen que estar ?omnipresentes?, el número sería excesivo, tanto si es asumido por los miembros del servicio de prevención propio, como ajeno o trabajador designado. Por lo tanto, parece oportuno formar a los encargados de obra con el nivel básico de 50 horas en prevención de riesgos laborales. Sin embargo, el riesgo de dejar la seguridad y salud en manos de terceras personas, que son a su vez de responsables de la producción, crea un conflicto de intereses, al intentar maximizar los resultados de producción con los resultados de seguridad; por lo que parece imprescindible que todo trabajador tenga conocimientos básicos, mínimos de seguridad. FORMACIÓN OBLIGATORIA La empresa Soprecal apuesta por la formación obligatoria y reglada de todos y cada uno de los trabajadores expuestos a esas circunstancias en su trabajo, para conseguir entre todos evitar los riesgos fácilmente evitables. Creemos que es tanto un derecho como una obligación para todos los que diariamente trabajamos en situaciones que comportan cierto riesgo, que por supuesto, debe estar bajo control. Parece conveniente que la obligada formación esté llevada a cabo por empresas especialistas y acreditadas en materia de seguridad y salud. Al igual que la cartilla profesional, que se encuentra en manos de la Fundación Laboral de la Construcción, en la que figura la categoría profesional del trabajador, y los períodos en las distintas empresas en las que haya ejercido su actividad, y que habilita a los trabajadores a estar exentos del período de prueba para los trabajos de su categoría, debería contener también las cualificaciones y conocimientos que en materia de seguridad y salud posee para poder ejercer una actividad. Por ejemplo, el trabajador que accede a un andamio, tiene que saber que si cambia su plataforma de trabajo también tiene que cambiar su barandilla, listón intermedio y rodapié; y algo tan sencillo no puede ser responsabilidad exclusiva de los agentes implicados según la normativa actual; es también responsabilidad del trabajador. Desde punto de vista de Soprecal se debe estudiar la posibilidad de impartir formación para todos desde la infancia y, posteriormente, en las diferentes actividades profesionales. Con el esfuerzo de todos y la madurez que nos otorga el paso del tiempo, estoy seguro que en un futuro cada vez más cercano, los accidentes se reducirán al objetivo de no accidentes laborales. 40 Javier Barbero, director de Asistencia Integral en Prevención. Asistencia Integral en Prevención aspira a convertirse en un referente en la región Asistencia Integral en Prevención es un servicio de prevención de riesgos laborales acreditado en las cuatro especialidades existentes: seguridad, higiene industrial, psicosociología y ergonomía y vigilancia de la salud. La compañía, gracias a sus recursos técnicos y humanos, puede ofrecer un servicio de prevención privado integral a cualquier empresa. El reto de Asistencia Integral en Prevención es convertirse en referente regional en su sector, ofrecer un servicio de calidad y a corto plazo su objetivo es consolidar su presencia en Castilla y León y abrirse al mercado nacional. En la actualidad, la empresa es el mayor servicio de prevención privado en nuestra comunidad autónoma. Los responsables de la firma apuntan que existe un grupo relevante de empresas, tanto grandes como pymes, que desarrollan iniciativas y esfuerzos importantes para intentar mejorar las condiciones de trabajo en sus centros, mientras que para otro conjunto de compañías ?la prevención es una formalidad que cumplimentar para no tener problemas con la Administración?, señalan. Este hecho, explican, se produce en ocasiones por la complejidad con que se ha diseñado un sistema de gestión como el de riesgos laborales, por lo que la tarea de los servicios de prevención es asesorar y gestionar la acción preventiva. Asistencia Integral en Prevención se constituyó en 1999 con el objetivo de crear un servicio de prevención de riesgos laborales de ámbito regional capaz de prestar su asistencia a las empresas de Castilla y León ?de forma independiente, autónoma y con un estándar de calidad elevado?, apuntan los responsables de la empresa. DELEGACIONES En los cinco años de andadura, la firma ha crecido hasta contar con cinco delegaciones en la comunidad autónoma y una cartera con más de 700 clientes. En opinión de los ejecutivos de la compañía, la Administración debe ordenar, impulsar y coordinar acciones encaminadas a mejorar la prevención de riesgos laborales, además de asumir la responsabilidad sancionadora de las conductas ilícitas. Desde 1995 se han desarrollado y financiado acciones dirigidas a mejorar el nivel de prevención en las empresas, en cambio éstas asocian a la Administración con el papel sancionador de las inspecciones de trabajo, según explican en la firma. Los responsables de la empresa proponen, para intentar mejorar la actual situación, la elaboración de un plan nacional de prevención de riesgos laborales que contemplase acciones concretas y ayudas financieras. Nº 101 Octubre 2004
