Página 82 del número 239, de abril de 2016
opi eco.qxp_maqueta consis 21/03/16 15:24 Página 1 82 opinión Urbanismo y economía, binomio necesario LUIS TORROGLOSA MARTÍNEZ Economista D esde el punto de vista doctrinal, ya que ninguna normativa ha establecido de forma clara y concisa su definición, debemos entender el urbanismo como la disciplina que tiene por objeto la ordenación del territorio y como fundamento el establecimiento del uso racional del espacio físico, pero siempre considerando como elemento nuclear al ciudadano en convivencia. El urbanismo en la actualidad es una de las principales ocupaciones y preocupaciones de la actividad municipal y debe contemplarse siempre en un contexto multidisciplinar y poliédrico por quienes trabajan y reflexionan sobre el modelo territorial planificado y ejecutado. Deben aportar sus habilidades, entre otros, los profesionales de la arquitectura, de la ingeniería, de la labor jurídica, de la geografía, de la sociología, del medioambiente, del patrimonio y la arqueología, etc., y por supuesto, de la economía. No podemos obviar que el urbanismo, entre otras cuestiones, debe establecer cuáles son los suelos que deben dedicarse tanto a usos productivos (industriales, terciarios, agrarios, etc.) como a usos residenciales, regulando su intensidad y tipología; debe definir asimismo los sectores y ámbitos territoriales susceptibles de transformar, las zonas y elementos que se deben proteger, la movilidad de las personas y servicios, el equilibrio de los espacios públicos, y toda una amplia gama de infraestructuras y equipamientos públicos y privados, que deben contribuir a mejorar la convivencia y la calidad de vida de los ciudadanos Todas estas acciones o actuaciones que se diseñan para alcanzar el objetivo deseado (base conceptual de la planificación estratégica del territorio) deben estar sustentadas en una realidad de ejecución y necesariamente deben estar avaladas por un análisis de pensamiento económico y financiero. En definitiva, las acciones y actuaciones necesarias deben programarse en el tiempo (cuándo), deben establecerse su coste (cuánto) y deben definirse su financiación (quién). Documentos normativos de calado económico La totalidad de la normativa de suelo y urbanística vigentes, tanto estatal como autonómica, exigen en sus textos la obligatoriedad de Nº 239 ABR?16 incorporar documentalmente un análisis de naturaleza económica en los instrumentos de planeamiento, tanto general como de desarrollo, y en las actuaciones de rehabilitación, regeneración y renovación urbana, que han sido tradicionales en el sistema urbanístico español, aunque sus contenidos, estructuras y finalidades han experimentado en los últimos años una importante evolución. Independientemente de la terminología acuñada por cada legislación autonómica, las propuestas y determinaciones de los instrumentos de ordenación y de las actuaciones sobre el medio urbano, sean o no de transformación urbanística, deben plasmar su realidad en los siguientes documentos de concepción económica: Estudio Económico, Informe de Sostenibilidad Económica y Memoria de Viabilidad Económica. Modelo urbano No obstante, conviene incidir en que estos documentos no sólo son necesarios para cumplir formalmente una norma, sino que son especialmente significativos e importantes para el desarrollo del modelo urbano deseado, porque los están demandando el mercado, y sus contenidos deben dar respuesta real a todos los agentes públicos y privados intervinientes, desde los planificadores a los operadores y por supuesto, a los ciudadanos. Con la primera Ley estatal del Suelo y Ordenación
