Página 135 del número 167, de abril de 2010
12/3/10 14:45 Página 1 MO 137-motor RENAULT FLUENCE 1.5 DCI OR T Influencia mundial Santiago de Garnica oncebido en Corea por Samsung, fabricado en Turquía, con un tren rodante posterior de origen Nissan, motores diésel nacidos en Valladolid y orientado para venderse en los mercados de medio mundo, con el Fluence Renault ha optado por crear un modelo con una personalidad exterior propia. La distancia entre ejes es de 2,70 metros, lo que permite obtener un mayor espacio para las piernas de los ocupantes de las plazas posteriores, que así disfrutan de la mayor amplitud del segmento. Entre el incremento de batalla y el maletero, el Fluence es un coche largo con sus 4,62 metros de longitud. En el interior, el ambiente es semejante al Mégane, salvo algún detalle como la instrumentación, pues el Fluence tiene todos los indicadores con las clásicas agujas. Para los asientos se ha optado por un mullido blando para mejorar la comodidad. El maletero, con 530 litros, se sitúa entre los mejores de su segmento y además la boca de carga es de gran tamaño. La rueda de repuesto que se aloja en su interior es, en el caso de la versión probada, del mismo tamaño que las otras cuatro. En caso de necesitar más espacio para equipaje, las banquetas y los respaldos de las plazas traseras se pueden abatir como si fuera un cinco puertas. El equipamiento puede llevar en el nivel más alto faros de xenón, climatizador de dos zonas, acceso y arranque sin llave mediante tarjeta manos libres, navegador Carminat TomTom con pantalla en color de 5,8 pulgadas, Bluetooth y conexión USB y para iPod, entre otros elementos. La amortiguación es bastante firme con el fin de resistir un uso continuo en malas carreteras. Esta firmeza supone una ligera pér- C dida en comodidad respecto al actual Mégane de cinco puertas, pero a cambio tenemos un admirable control del balanceo en curva de la carrocería. Además, el Fluence está bien insonorizado gracias a su suelo milhojas con muchas capas de aislante hasta tal punto que el filtrado de las resonancias y ruidos de rodadura parecen más propio de un modelo del segmento superior. La gama de mecánicas se ha simplificado mucho. Dispone así de un 1.6 de gasolina de 110 cv y en diésel utiliza el 1.5 dCi en variantes de 86 y 105 cv. Esta última es la versión probada. Con un cambio de seis velocidades, es una motorización perfecta para este modelo, que tendrá una amplia clientela entre profesionales al registrar un consumo real muy inferior al 1.6 de gasolina y prácticamente igual al 1.5 dCi de 85 cv. En autovía a 125 km/h, logramos un consumo de cinco litros a los 100 kilómetros. La media en la prueba ha estado en 6,2 litros. En síntesis, el Fluence es una berlina media por el precio de un compacto, homogénea, amplia, con un gran maletero y cómoda, y concebida para durar, pues no en vano parte de su mercado son países en desarrollo con malas carreteras. Y adecuada igualmente para grandes rodadores, de ahí que se adapte perfectamente a un uso de flotas de empresa. Nº 167 Abril 2010
