Página 3 del número 127, de diciembre de 2006

editorial 20/11/06 16:36 Página 1 OPINION Tierras para el águila econozco que este mes me ha resultado muy difícil escribir sobre un tema económico porque mi atención se desvía hacia las atractivas pistas del circo mediático: el mal llamado proceso de paz -curioso conflicto bélico éste, donde una parte sólo pone las víctimas y la otra las pistolas y las bombas-, el caso Malaya con el desfile de famosos que pasan a la sombra, los escándalos urbanísticos que salpican toda la geografía nacional con personajes tan novelescos como el Pocero, la reedición del tripartito en Cataluña, los constantes cruceros de emigrantes a las costas del sur de España, ... Pero vamos a intentarlo, que para eso me pagan. Al fin y al cabo, como reconoce el planetario escritor Álvaro Pombo: ?El dinero es una clase de poseía -según una cita de Wallace Stevens-, entendiendo la palabra poesía en su sentido griego original de creaAlberto Cagigas ción, poiesis, de acción sobre el mundo real. La economía es uno de los sisacagigas@castillayleoneconomica.es temas que el hombre tiene para hacer inteligible el mundo, para mejorarlo, para cambiarlo?. Pues vamos allá. En pocos meses, dos proyectos urbanísticos relacionados con la construcción de campos de golf han sido rechazados, por diferentes motivos, en estas yermas tierras de Castilla y León. Uno, porque dicen que habría problemas con el agua, y el otro, porque el pueblo -que es soberano- lo ha rechazado en un referéndum. Ambos complejos se iban a levantar en zonas rurales de nuestra región. Casi a la par, se presenta un informe de ForoBurgos, con las siguientes conclusiones: la desestructuración de las bases económicas tradicionales ha provocado la falta de viabilidad socieconómica de gran parte de los núcleos rurales de la región, donde el 94,3% de los 2.248 municipios tiene menos de 2.000 habitantes y de éstos, un 80% tiene menos de 500 vecinos y más del 12% no consigue rebasar el centenar de almas. Pues bien, en estos desiertos demográficos se están rechazando proyectos empresariales, no sé si con el prurito de evitar la marbellización de los campos de Castilla. Va a resultar que ahora, cuando en menos de un mes vamos a dejar de ser una región Objetivo 1 en la UE, andamos sobrados de inversiones, sobre todo de la iniciativa privada. Una cosa es que las estadísticas digan que el PIB por habitante de nuestra región ya está por encima del 75% de la media comunitaria y otra muy distinta es que ese porcentaje pueda aplicarse a las zonas periféricas, que deben registrar unos ratios en términos de riqueza muy parecidos a los países recién incorporados a la UE. No hace falta ser jugador de golf -yo no lo soy- para saber que este deporte mueve una enorme actividad económica, que además se complementa muy bien con la oferta de turismo de interior de esta tierra. Según varios estudios, los golfistas (hay casi 300.000 federados en España) viajan de media unas nueve veces al año para practicar su deporte favorito y pernoctan de dos a cuatro noches en su lugar de destino. Además, su época favorita para desplazarse es la primavera y el otoño, donde la climatología es más suave. Aparte de recorrer los greens, estos deportistas dedican parte de su ocio a disfrutar del entorno, la gastronomía y el patrimonio cultural. En definitiva, que se trata de un cliente muy valorado por los destinos turísticos. Ítem más, este deporte, cuando va ligado a promociones urbanísticas, dinamiza el sector de la construcción, en una primera fase, y luego el de los servicios ligados a esas urbanizaciones (jardinería, comercio, restauración, etc). Por eso, en otras regiones se ha creado una auténtica industria del golf, como en Andalucía -no me creo que tengamos más problemas con el agua que ellos- o Cataluña, que tiene redactado un Plan Director del Golf, donde establece las directrices y los controles ambientales para los campos existentes y futuros, coordina su ubicación y desarrolla un modelo basado en una gestión eficiente del agua, la conservación de especies autóctonas y la integración paisajística. Aquí tenemos tierra y estamos cerca del mayor mercado de España (Madrid), pero aún no sabemos cómo incorporar más valor añadido a estas desérticas zonas, mediante una oferta complementaria a las casas rurales, la agroalimentación casi artesanal de esos núcleos o su patrimonio natural y, en bastantes casos, monumental. Como para algunos el dinero es poesía, recordemos los machadianos versos sobre los campos de Castilla: ?Veréis llanuras bélicas y páramos de asceta / -no fue por estos campos el bíblico jardín-; / son tierras para el águila, un trozo del planeta / por donde cruza errante la sombra de Caín?. Y en ésas estamos, que se lo pregunten a los frustrados promotores de los complejos residenciales con campos de golf. R Director Alberto Cagigas Directora Comercial Luisa Alcalde Departamento Comercial Juana Daldea Víctor García Diseño Gráfico Marta Higuera Corresponsales Ávila Antonio Mayoral Burgos César Presto León Nuria González Palencia Alberto Abascal Salamanca Elena Cordero Segovia Fernando Aranguren Soria Saturio Ugarte Zamora Óscar Alonso Motor Santiago Garnica Fotografía Ana Rodríguez de la Vega Consejo Editorial Roberto Escudero, Francisco Ledesma, José Andrés Lorenzo, Juan Carlos de Margarida, Victoriano Martín, Olga Ogando, José del Ojo, José Ramón Perán, Carlos Sánchez-Reyes, Antonio de Santiago, José Miguel Useros Edita EDICIONES LA MESETA S.L. C/ Miguel de Unamuno, 96 47008 Valladolid Telf: 983 01 81 81 Fax: 983 01 81 82 redaccion@castillayleoneconomica.es Suscripciones Telf: 983 01 81 81 Web www.castillayleoneconomica.es Imprime PrinterMan Depósito Legal VA-247-1996 ISSN 1136-3096 Nº 127 Diciembre 2006 OPINION