Página 3 del número 101, de octubre de 2004
pg.3 22/9/04 09:04 Página 1 OPINIÓN Director Alberto Cagigas Directora Comercial Luisa Alcalde Departamento Comercial Juana Daldea Víctor García Diseño Gráfico Marta Higuera Corresponsales Ávila Antonio Mayoral Burgos César Presto León Nuria González Palencia Alberto Abascal Salamanca Elena Cordero Segovia Fernando Aranguren Soria Saturio Ugarte Zamora Óscar Alonso Motor Santiago Garnica Fotografía Ana Rodríguez de la Vega Consejo Editorial Roberto Escudero, Francisco Ledesma, José Andrés Lorenzo, Juan Carlos de Margarida, Victoriano Martín, Olga Ogando, José del Ojo, José Ramón Perán, Carlos Sánchez-Reyes, Antonio de Santiago, José Miguel Useros Edita EDICIONES LA MESETA S.L. C/ Miguel de Unamuno, 96 47008 Valladolid Telf: 983 01 81 81 Fax: 983 01 81 82 Correo electrónico redaccion@castillayleoneconomica.es Suscripciones Telf: 983 01 81 81 Web castillayleoneconomica.es Imprime Gráficas Calima Depósito Legal VA-247-1996 ISSN 1136-3096 Una economía más productiva n reciente informe de una entidad de ahorro catalana ha pasado bastante desapercibido en estos pagos pese a afirmar que Castilla y León ha sido la cuarta región española con mayor incremento en la productividad del trabajo al registrar un alza del 9,8% en el período 1995-2002, cuando la media nacional se situó en el 4%. Medido en euros, el porcentaje se traduce en que un empleado de nuestra región ha pasado de producir 27.822 euros al año en 1995 a 30.554 euros en el pasado ejercicio. Esta evolución es una excelente noticia para la economía castellana y leonesa, que en este baremo también mantiene su viaje hacia la convergencia con el resto de España, aunque todavía es la octava región con mejores ratios de productividad, por lo que aún queda mucho camino por recorrer. Dicen los que saben de esto que el escaso aumento de la productividad de los trabajadores puede ser uno de los talones de Aquiles de nuestro país, sobre todo después de la ampliación de la UE y el consiguiente riesgo de la deslocalización. España ha basado su crecimiento económico en sectores con poco valor añadido, como ha sido la construcción, y hemos dejado a un lado la inversión productiva en bienes de equipo y en negocios con un alto componente tecnológico. Como consecuencia de esta estrategia, al final hay una pérdida de competitividad. Antes nos movíamos en unos mercados más cautivos donde la aparición de noticias como éstas apenas preocupaban, pero ahora estamos U inmersos en una economía más internacionalizada en la que es muy difícil sobrevivir con unos costes laborales más elevados que los países del Este y unos ratios de productividad inferiores a las principales potencias europeas. EJEMPLOS A COPIAR Como a estas alturas de la historia casi todo está inventado, lo mejor es copiar a quien lo hace bien y en nuestra comunidad autónoma tenemos los ejemplos de las filiales de las multinacionales. Para ellos, comparar los ratios de productividad no es algo nuevo pues sus datos son constantemente evaluados respecto a los de otras plantas hermanas ubicadas tanto en la Europa occidental como en los países emergentes. Tal vez el caso más significativo le tenemos en la competitiva industria de la automoción. Si les pregunto por la fábrica más productiva de Europa, muchos pensarán en alguna alemana, francesa, sueca o, tal vez, italiana; países donde se ubican las sedes de las principales marcas automovilísticas. Pues no, la tenemos mucho más cerca, ya que Carrocería Montaje de Valladolid es la primera fábrica de Europa en productividad, según el informe Harbour, o la segunda del Viejo Continente, según el estudio World Markets Research Centre, que calcula el número de vehículos fabricados por empleado. Este hito avala que en Castilla y León existen las condiciones necesarias para ser los más productivos y que no hay excusas para no intentarlo, como la presión fiscal, los gastos laborales o los costes del transporte, porque Nº 101 Octubre 2004 Alberto Cagigas acagigas@castillayleoneconomica.es los directivos de Renault España han demostrado que sí se puede. Insisto, los que saben de esto afirman que el modelo de crecimiento económico basado en el ladrillo y el turismo muestra síntomas de agotamiento y aconsejan apostar por una inversión más productiva, sobre todo con un alto componente tecnológico. La receta también es válida para Castilla y León, que ha conseguido aumentar su productividad por la menor influencia de la construcción y el turismo respecto al desarrollo del litoral español. Para atraer nuevas inversiones ya no basta con tener paz social, costes laborales contenidos, una ubicación estratégica o una Administración sensible a los proyectos empresariales. Ahora, en Europa, se mira con lupa la productividad, que es una de las pocas ventajas que pueden ofrecer las regiones de la UE desarrollada frente a sus vecinos del Este. 3
